CARACAS (Reuters) - Seis hombres que portaban armas de alto calibre secuestraron y desvalijaron en la madrugada del lunes el autobús en el que viajaba el equipo de Trujillanos de la primera división de Venezuela, dejando a los futbolistas sin zapatos, uniformes y demás posesiones de mayor valor, denunció el club.

Los hombres armados desviaron y retuvieron por más de dos horas el autobús en el sector Boca de Uchire, en el estado oriental de Anzoátegui, mientras el plantel volvía de la derrota 2-1 ante Monagas el domingo por la liga local.

"El club fue retenido por 2Hr.35Min. Amenazaron que si el bus tenia GPS o estaba escoltado, detonarían granadas para no dejar evidencia", relató Trujillano FC en su cuenta de Twitter @trufc.

"Nos obligaron a entregar las pertenencias y nos quitaron los celulares, las prendas, el dinero, cámaras de video, utensilios, balones, dólares que llevaban los jugadores y hasta el DVD del autobús", explicó otro jugador.

Ningún miembro del equipo sufrió lesiones

El club condenó los "lamentables hechos vandálicos que afectan el desarrollo del fútbol nacional" y mostró imágenes de los futbolistas y el cuerpo técnico descalzos, sin camisetas y de la bodega del ómnibus totalmente saqueada.

La Asociación de Clubes Profesional del Fútbol Venezolano (FutVE) se sumó al rechazo en un comunicado emitido el lunes.

"Los equipos de fútbol, jornada a jornada, recorremos el país, la mayoría de las veces por carretera, confiando plenamente en las autoridades de seguridad, a quienes hoy recurrimos para solicitar que situaciones como esta no se repitan", reza la comunicación de la Asociación FutVE.

Venezuela es uno de los países más peligrosos del mundo, según cifras de las Naciones Unidas, y recientemente perdió la localía de la Copa Davis por ello.