Por: Luis E. Forero Medina - Abogado/Especialista en Saluderecho

En época preelectoral en algunos países suramericanos, saltan constantemente a la arena política candidatas y candidatos de todo el mundo; en la pasarela y ante el jurado calificador se presentaron las siguientes candidatos-as, todas merecedoras del cetro real:

Mi nombre es maltrato infantil, mis medidas son 40 millones de menores de 15 años que sufren violencia, abusos y abandono en la familia, la escuela y la comunidad, vivo  en América Latina y el Caribe.

Mi nombre es feminicidio, mis medidas son  1.998 mujeres de 17 países de la región (14 de América Latina y 3 del Caribe)  víctimas  feminicidio el año pasado.  

Mi nombre es hambre,  procedo de  los  países en desarrollo, mis medidas son 795 millones de personas que  me acompañan  en todo el mundo

Mi nombre es  desnutrición, soy  causante de la muerte en el mundo de  3,1 millones de niños menores de cinco años cada año.

Mi nombres es  pobreza, conmigo  66 millones de niños en edad escolar primaria asisten a clases. En América Latina y el Caribe me pertenecen  42,5 millones de esos seres.

Mi nombre es  contaminación, por mí 7 a 8 millones de personas en todo el mundo  muere de manera prematura por la mala calidad del aire.  

Mi nombre es  enfermedades no transmisibles, y causo  el 63 % de las muertes a nivel mundial por  cáncer, enfermedades cardiovasculares, diabetes y  enfermedades mentales. Vivo preferentemente en los países de ingreso bajo y mediano.

Mi nombre es Nini, ni estudio ni trabajo, represento al tercio de los 1800 millones de jóvenes del mundo.

Mi nombre es  emigración, otros me llaman refugiada, represento en América Latina y el Caribe, 30 millones de personas que no  vivimos en el  país de su nacimiento.

Mi nombre es  homicidio, vivo en América Latina y el Caribe, mis medidas son un promedio de 24 homicidios por cada 100 000 personas por año, es decir el 37 % de los homicidios en el mundo. Ocho de los diez países más violentos en el mundo se encuentran en esta Región.

Mi nombre es  discriminación de género, soy peruana, sólo el 3% de nosotras participamos en directorios. Le ganamos casi a todo el mundo.

Mi nombre es  educación, soy peruana, mi país invierte en mí el  3,7% del PIB, uno de los más bajos de Suramérica.

Mi nombre es  bonanza mundial, este año creceré un  2,7 %., que quedará en el 0.02% de los dueños del planeta.

@luforero4