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Profesora - Psicopedagoga argentina (Mar del Plata) |
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Muchas cosas son exactamente iguales en todo el mundo , y otras varias han cambiado para siempre. La avaricia sin fin en algunos seres parece enclavada en el planeta. Una maldad de antaño disfrazada de armas, internet y saqueos. Mas suaves , en apariencia, excepto en los lugares donde se encarniza.
Gaza estos días nos mostró ese capricho sin sentido de la guerra. También aparecen eventos individuales indescriptibles de locura y de muerte, diría nuestro querido Horacio Quiroga. En la Argentina cada miércoles en frente al congreso hay un enfrentamiento . La manifestación de la insensibilidad, y la tergiversación de los artistas del miedo, que aluden "zurdos", mientras que lo que pasa en realidad son personas que NO TIENEN DINERO PARA COMER NI PARA LOS REMEDIOS. Y no importa eso. Se saca de foco.
Lo siniestro es una compañía para quienes el miedo los convoca, o para quienes necesitan canalizar sus malos pensamientos por ahí. Los jóvenes se ríen y disfrutan de la morbosidad asesina. De las violencias súbitas y del terror . Sin darse cuenta que se llenan de cortisol y luego no saben que hacer con sus vidas. El temible quiebre entre las palabras y las acciones .
No es sano.
Pero es "normal": esta normalizado . Siglos de ficciones envenenadas en una modernidad que dejó afuera lo mucho que ahora vuelve. Pero para volver algo se termina. Y se tiene que terminar aún. Ese dejarse enajenar por el cortizol de la tendencia cultural conquistadora llamada "literatura", por ejemplo, que más que arte , es una tendencia de mercado o un paradigma narrativo de los dominadores.- Digo "narrativo" porque la poesía se quedó casi afuera como los códices o los quipus.
Se termina. El fin del mundo lento y silente... en las mentes que no paran , llaman sin darse a conocer, planean para seguir queriendo tener el control, no duermen... y no pueden ver salir el sol...quedan sumergidas en esa oscuridad de la ansiedad y el poder de la personalidad.
Sa cultura se desliza por una postmodernidad que se ancla en un barroco desmadrado de fatalidades exageradamente personales con atisbos de comunidad fotocopiada. Jaque mate al ego así como lo conocíamos.
Aquí en este sur donde siempre , pero siempre "vamos" la vida "al revés" . Y no es narcisismo, es experiencia histórica: nuestraamerica, hora de nombrarla por su nombre original: " Abya Yala" tiene su termómetro intocable en su cultura, lo popular y en las luchas por la justicia social . Vuelven los saberes ancestrales sobre aquel mundo que sí, como dijeron los mayas "se terminaba". Y se terminó.
Desde el 2012 hasta aquí se va anidando otro mundo: un anticonsumo y un alerta sobre los recursos naturales. Nos queda dignidad y valentía, templanza y sabiduría para transitar la peor oscuridad hasta el 2035-2037.- Tiempo en el que las grandes masas se enfrentaran con el plan de querer controlar, intoxicar , manipular y enloquecer sus vidas cada vez más.- Solo las personas despiertas en su destino y su karma podrán pilotear ello. Personas entrenadas en el campo energético y físico de manera integrada. Ancladas a la tierra y sus ritmos. A las estrellas y sus ritmos. La propaganda de la new age será a las vistas un real fraude , guías espirituales, coachs y otros gurúes quedaran a la vista en sus mentiras. Otro fin del mundo para quienes anden queriendo encontrar respuesta desde fuera. Quiénes pongan su salud en manos de estos seres empecinados en la avaricia puede que pierdan su poder definitivamente. Y seguirán mal muriendo y mal naciendo. Ni hablar de otra profesiones dominantes.
Esa inyección diaria y subliminal que todo lo esfuma, donde todo es absolutamente descontrolado y personal se encuentra con personas que dicen "otra cosa", artistas que denuncian , e investigadores que empecinadamente producen otros saberes y preguntas. Lideres religiosos, intelectuales y políticos dan que hablar aunque nadie los quiera escuchar...corrientes y mas corrientes de este mar que sigue generando olas ... y "NO" tsunamis. Cada ser podrá escuchar y ver según su camino y experiencias.
La colectividad y grupalidad como la conocemos también se extingue. Por eso las familias se refundan. Los grupos de amigos se distancian y se generan nuevos. Y muchas realidades se terminan de manera casi inmediata de manera consciente o de manera abrupta y dolorosa .
Tiempo de "pachakuti". El cielo en la tierra y viceversa.
Aferrarse a lo superfluo es perderlo todo.
Y mientras el ritmo de la vida sigue... "aun no han dicho basta los planetas...veras amanecer cuantas veces quieras", decía Tagore en medio de las oscuridades mas profundas. Un sutil equilibro nos atraviesa cada vez más a quienes logramos confiar en lo aparentemente invisible, eso tan antiguo como el mundo para muchos, algunas le llamamos "amor" , amor "universal" . Por favor , ni pienses que me refiero al amor de par. Esa es otra historia. Que también va llegando a su fin, así como la conocemos.
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