En OPINIÓN LIBRE |

Despliegue inusitado y pensar en una sola dirección tras la muerte del Abimael Guzmán

Los hechos deleznables sucedieron, pero no hacer fiesta sobre los cadáveres. Hasta los felinos más fieros entierran a sus víctimas. No más propagandas a Abimael Guzmán.

 



Por: Eucadio Gutiérrez Solano

 

Nota del auto: El que escribe el presente comentario estuvo enfermo cerca de 5 años por tomarse con un grupo de senderistas, cuando realizamos un trabajo de investigación en arqueología e historia. De modo, jamás estaré de acuerdo con el accionar sanguinario de los terroristas.

 

Murió Abimael Guzmán, el líder de los terroristas. La prensa y la derecha hizo su debut, a toda luz, haciendo un despliegue inusitado, aprovechando la muerte de este terrorista que causó miles de muertes y dejó enfermo a millares de personas. Por su macabra obra no comulgamos.

 

Somos un ser pensante, como tal apelamos a la Constitución y a la declaración Universal de los Derechos Humanos, para opinar. Nosotros discrepamos con la campaña atroz que, a nuestro juicio, es una escopeta de doble cañón.

 

Dejándolo ahí, nadie se enteraba. Ahora todos saben de sus atrocidades cometidas y se preguntan, ¿Qué quería Abimael, y por qué salió a la palestra? Y ahora, interrogamos, ¿Por qué ganó Pedro Castillo? Indudablemente las respuestas son parecidas: “La calamidad y corrupción del estado peruano”. En este punto todos los analistas han coincidido. El estado de abandono, postración y corrupción generalizada generó el triunfo del profesor Castillo. La situación sigue igual, nada ha cambiado.

 

No hemos leído la ley de apología al terrorismo. Pero nos conlleva a pensar que los peruanos estamos sometidos a pensar en una sola dirección. Existe, creemos, una mordaza, que priva la libertad de opinión y pensamiento. Decir lo que se piensa y expresarse libremente sus ideas son un derecho. No está escrito por las puras en la Constitución.  

 

Respondemos con otra pregunta. ¿Habría tenido presencia, los senderistas, en un gobierno democrático ligado al pueblo? No, jamás. Hace años escuchamos decir al Dr. Nagasaki, ¿por qué apareció sendero? Nadie le hizo caso.

 

Todos taparon la pregunta, a pesar de su importancia. Sendero nunca llegará al gobierno, presumimos, cuando existe un gobierno hermanado con el pueblo. Que siente y padece igual que los habitantes del Perú profundo. No es cuestión de quemar el último átomo del cuerpo de Guzmán, ni perseguir a los pensantes con el cuento de apología. Se trata de concientizar al pueblo con obras y hechos. Cuando no haya corrupción y exista un buen gobierno, el pensamiento extremista no tendrá sentido. Así de simple.

 

Aquí la prensa nacional está haciendo mucho daño. Creo atroz. La inmensa mayoría de peruanos no cree los sandeces expresados y brutal campaña contra el pueblo. Por eso ganó Pedro Castillo. Toda prensa fue arrinconada.  Qué vergüenza, para el mundo pensante. “A más calumnia, más aprismo”, decían los apristas, en su mejor momento. Basta de hacer “campaña” pro senderista. Los del pueblo estamos hartos de tanto hedor estomacal que expelen los periodistas. El Perú profundo necesita unidad. No de guerras. Las ideas se combaten con ideas.  Ninguna idea putrefacta eclosionada cuando exista un pensamiento coherente y verdaderamente democrático.      

 

Basta ya pensar en una sola dirección. Hay que decir la verdad por los 7 costados. Hacer que los peruanos abran sus cerebros lejos de infamias y calumnias, lejos de creerse dios, sabedor y director de lo que hay en el Perú. Los hechos deleznables sucedieron, pero no hacer fiesta sobre los cadáveres. Hasta los felinos más fieros entierran a sus víctimas. No más propagandas a Abimael Guzmán. Enterrarlo de incognito habría sido mejor. Estoy atosigado con la misma comida. Mi estómago regurgita, ante tanta pestilencia periodística.

 

 

 

 

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