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La colección de 'Culturas Antiguas del Perú' de la Universidad Católica, ningunea a Chincha

Hay de todo salvo la cultura de los indomables guerreros, maestros de la navegación y catedráticos del barro: Los Chinchas


Increíble pero cierto: Un falaz atentado contra la cultura Chincha comete la PUCP al publicar sus "Culturas Antiguas del Perú"
 

Por: Eucadio Gutiérrez Solano - Profesor/Periodista

No salimos de nuestro asombro cómo la PUCP (Pontificia Universidad Católica del Perú) comete un atentado de lesa historia contra Chincha. Hemos estado revisando las publicaciones que viene haciendo el diario “La Republica” correspondientes a las “Culturas antiguas del Perú”, avalada por la PUCP, en la que se ignora en forma absoluta “La Cultura Chincha”, en sus 10 fascículos (10F), olvido y marginación que no podemos permitir ningún chinchano que tenemos uso de razón, o cerebro funcionando.

Debe saber los estudiosos de la Pontificia Universidad Católica del Perú, que el Perú milenario en el consenso mundial, ha sido el único país antiguo que ha tenido 2 emperadores: El  emperador  chinchano., dueño de la costa: Hatunca Chumpiauca, y el de la sierra Atahualpa, como quedó demostrado  durante la sangrienta  toma de Cajamarca, en que fue asesinado el monarca de Chincha a manos de Pedro Pizarro, el 16 de noviembre de 1532. ¿Preguntamos lapidariamente qué cultura estuvo presente en la toma de Cajamarca? Nos dirán que eso corresponde a la época inca…

Además existe estudios y documentos como lo hallado por la etnohistoriadora María Rostworosky, de que Los Chinchas fueron los comerciantes y navegantes más famosos del continente prehispánico. De esto no cabe duda ni discusión. De otro lado pareciera que los profesionales de la PUCP se han olvidado de leer al Dr. Federico Kaufmann, sobre el primer mapa del Perú hecho por Diego de Rivero en 1527, donde figuraba Chincha como capital del Perú.

Asimismo debió nutrir su conocimiento leyendo la Crónica de Pedro Cieza de León, por decir lo menos. Ignorar la “cultura Chincha”, padre o engendrador de las culturas Paracas y Nazca, cuya influencia va más allá de la Cultura “Lima”, se presume.

Los teóricos de la PUCP han ido contra el pueblo de Chincha, publicando historias  cercenadas, omitiendo a culturas que en algunos casos han sido superiores a los mencionados. Esto es un verdadero sacrilegio inaudito contra la Cultura Chincha.

Es increíble que una universidad de tanto prestigio incurra en el olvido histórico e-inaceptable. La arqueología chinchana no solamente abarca lo que es el valle o el estudio de la mal llamada “Centinela”, sino su extensión llega más allá de los andes y de las lagunas.

La Cultura Chincha en los últimos tiempos, a nivel del valle diríamos, ha sido estudiado por Francisco Iriarte, Luis Guillermo Lumbreras, Alberto Bueno Mendoza, Francisco Medina, entre otros. Ellos tienen mucho que hablar de la Cultura Chincha, como el Dr. Bueno, especialista en la arquitectura monumental de los Chinchas.

Asimismo los petroglifos de Huancor, Cultura Chincha, fue estudiado con amplitud por el cubano Antonio Núñez Jiménez, que es la fuente histórica principal de Chincha, para los iletrados, que quizás ni siquiera conocen las maravillosas “escrituras pétreas” de la arqueología chinchana.

De manera los chinchanos no podemos aceptar, ni tolerar, ni agachar la cabeza, por incapaz, sobre la marginación cruel de la Cultura Chincha, que significa la humillación a nivel mundial de los chinchanos. No podemos permitir que estudios de pupitre tenga la desfachatez de omitir la “Cultura Chincha”, y sea el diario La República, que en otro tiempo publicó aportes de iluminados arqueólogos, sea ahora propagandita del estudio incompleto de la Cultura Chincha.

La desgracia histórica para los estudiantes de educación peruana: primaria y secundaria, es que  cuando estudien las culturas tengan que alimentar sus cerebros con historias cercenadas, lesivas y dañinas para la formación de la conciencia nacional. No hemos visto hasta el momento el pronunciamiento del Ministerio de Educación que viene aplicando la asnopedagogía, o pedagogía del embrutecimiento. La historia peruana en vez de ser mutilada, merece más bien ser ampliada y difundida, con nuevos aportes.  







 

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