Por: Eucadio Gutiérrez Solano  Profesor/Periodista

El presente enfoque trata de diagnosticar -desde una óptica ontológica- las acciones de la SUNEDU, en relación a la educación superior del pueblo iqueño. Para nosotros es una aberración y atropello cometido contra la Universidad Nacional San Luis Gonzaga de Ica (UNICA), vale decir contra la Región Ica.

Se trataría de una barbaridad inentendible para los cráneos pensantes.  Usando el sentido común y la razón la UNICA no puede estar por debajo de 2 universidades particulares: San Juan Bautista y la Universidad Autónoma de Ica (Ada Byron), que tiene pocos años de creación.  

Los orígenes de la creación o autorización para su funcionamiento de estas 2 universidades son alucinantes. Ambos comenzaron a funcionar en ambientes inadecuados por allá y acá, con un personal de bajo nivel académico.  Posiblemente este punto no ha sido contemplado por la SUNEDU.  En la actualidad los estudiantes han cuestionado varias veces, por los medios de difusión masiva, 2 hechos: a) La calidad educativa y b) El elevado costo de la enseñanza.

Es más, la autorización para su funcionamiento costó muchos sacrificios. Ambas universidades arrastran males, denunciado en sus inicios. Determinados ex alumnos y ex profesores nos dijeron que era prohibido desaprobar. Vale decir, los ingresantes tenían que continuar estudiando como pueda hasta titularse. La plata hace bailar al mono. Se habló de un caso insólito que, un docente X tenía aprobar si o si a un estudiante fantasma. Por ética el catedrático tuvo que retirarse.

Que se sepa, en el ámbito intelectual de la Región la presencia de San Juan Bautista y la Universidad Autónoma de Ica ha sido ignorada. Por lo menos en Chincha sus presencias no tienen importancia. Estas universidades nunca presentaron trabajos de investigación. Muchos menos en el rubro cultural no se sabe su participación.

En el campo económico estas universidades lucraron cobrando elevadas sumas a los estudiantes. Se sabe que varias de las entidades particulares construyeron sus edificios a costa de los alumnos. Muchas universidades se llenaron de plata explotando a los estudiantes.

De otro lado, sabemos también que ciertas universidades particulares pagaban a los rectores sumas exorbitantes, siendo un escándalo, pero permitido por el gobierno y el Congreso de la República, en que estos personajes se llevaban fácilmente 2 millones de soles mensuales.

Miles de estudiantes han venido protestando por tan descarado cierre. Las autoridades y la prensa iqueña se comieron el sapo. Si este cierre se hubiera producido en otros lugares, sería producido un cataclismo. Recientemente ha habido denuncias contra los funcionarios de la SUNEDU, por favorecer supuestamente a algunas universidades particulares.

De acuerdo a nuestra observación, demostrado por sus hechos, los directivos de la SUNEDU carecen de nivel profesional, porque sus dictámenes son demasiado retóricos, que más parecen a un examen que se daban en la época colonial.

Los personajes que están en la SUNEDU, se parecen a los inquisidores, sin calidad, que persiguen a mentes ilustres para opacar su existencia. Se parece a la fábula del “sapo y la luciérnaga”. Es necesaria la intervención de las Fiscalía para determinar la veracidad de las denuncias, de lo contrario se estaría avalando la corrupción. En tanto el Congreso de la República guarda silencio, cuidando sus intereses.