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BLOG BUSCANDO AMÉRICA: El nuevo capitán del buque de la salud pública peruana

Cuando F. D’Alessio ingresó al Palacio de Gobierno se imaginó que PPK le iba ofrecer el Ministerio de Defensa o el de Educación, jamás pensó en suceder a Patricia García en salud.

Su antecesora en más de un año no pudo alcanzar una “interoperabilidad de los servicios de salud pública”. Ahora Fernando D'Alessio tiene que sacar a flote el buque insignia del gobierno de PPK.
Su antecesora en más de un año no pudo alcanzar una “interoperabilidad de los servicios de salud pública”. Ahora Fernando D'Alessio tiene que sacar a flote el buque insignia del gobierno de PPK.

 

Por: Luis E. Forero Medina - Abogado/Especialista en
Saluderecho


Cuando el pasado 16 de setiembre  Fernando D’Alessio ingresó a las 4: 44 de la tarde  al Palacio de Gobierno  se imaginó que el presidente Pedro Pablo Kuczynski lo invitaba para ofrecerle el Ministerio de Defensa o el de Educación, jamás pensó en suceder a Patricia García en salud.

Con ese reto el Ministro sin saber en qué se embarcó, se pone a prueba así mismo ganar una  batalla, la de  enderezar la salud pública peruana. Después de las sucesivas reuniones de empalme, saltó a la vista una irrefutable conclusión: el sistema de salud está atomizado, disgregado y descompuesto.

 

« Su antecesora en más de un año no pudo alcanzar una “interoperabilidad de los servicios de salud pública”. »

 


Para empezar la tarea presidencial de darle un revolcón al sistema de salud pública peruana;  la  consigna del Ministro de Salud con su segundo a bordo es  recomponerlo totalmente. Aunque no se aplicará la temida poda administrativa en el Ministerio de Salud (Minsa), llama la atención que a principios del gobierno de  Humala  en julio de 2011 el Minsa contaba con 1.200 empleados, y  ahora son 3.000.  Aunque esa nómina continuaría, lo cierto es que los gastos administrativos se reducirán considerablemente en todas las entidades del sector.

La punta del iceberg es  el abandono, corrupción e ineficiencia de la salud pública. Para estas y otras batallas de  la “guerra” que el Ministro de Salud enfrenta hace más de un mes,  se rodeó de toda una artillería. Siete agencias de cooperación internacional, agrupadas en el Sistema de las Naciones Unidas en Perú, supervisarán la ejecución de los programas que desarrolla el Minsa, y contribuirá a que se ejecute  el  presupuesto de los hospitales y organismos del sistema de salud, en atención a que los responsables de emplear el dinero, prefieren mantenerlos en bancos.  Por todos los frentes pretende blindarse el Ministro de salud; una vez al mes, se reunirá con el  Colegio Médico del Perú, las Federaciones de médicos, enfermeras, la Federación de Obstetras del Ministerio de Salud del Perú (Fominsap), la Federación Nacional Unificada de Trabajadores del Sector Salud (Fenutssa), la Superintendencia Nacional de Salud (Susalud) ,  sindicatos de  trabajadores del Minsa, etcétera  para que le  “ayuden a que la salud se pueda desarrollar”.

Muchas son las  promesas pendientes y necesidades en salud, “buque insignia del desarrollo”, que el propio Ministro decidió  viajar a todas las ciudades, las más   importantes y  las más pequeñas para enterarse de primera mano de la  situación en recursos humanos e infraestructura. La política de descentralización es parte de la agenda en salud.

 

 

« Los hospitales regionales bajo la tutela de los gobiernos regionales, se han convertido en fortines políticos y burocráticos, pues gozan de autonomía para nombrar el personal  administrativo y médico. »

 


En todas las regiones se encuentran trabados diversos  proyectos de inversión en materia de salud. Un verdadero “golpe de estado” es lo que se espera en las regiones, donde por fin  el  Minsa recuperará la rectoría de los hospitales, hoy bajo la tutela de los gobiernos regionales, que supuestamente los han convertido en fortines políticos y burocráticos, pues gozan de autonomía para nombrar el personal  administrativo y médico. Aunque el Minsa transfiere importantes recursos económicos a los hospitales que están fuera de Lima, no tiene ni voz ni voto para cuestionar su manejo.

Los empleados de las  Diresa o Direcciones Regionales de Salud y  directores de salud y hospitales regionales son nombrados sin intervención del Minsa. El traspaso de recursos económicos de esta cartera a  las regiones para la salud es sano, empero, se desdibuja cuando gobernadores y autoridades regionales con cartas marcadas meten las narices en los nombramientos y  no invierten  lo transferido por el Minsa; dejando  obras e inversiones en salud sin ejecutarse o atrasadas.  En 2018 se trasferirán a las regiones  S/ 5,000 millones para salud, sin que deban rendir cuentas a nadie, mucho menos al Minsa. Eso es “jugar con la salud de los peruanos”, dijo D’Alessio. En  los hospitales de las Regiones muchas veces ni a la prensa se le permite su ingreso;  sin embargo pese a su hermetismo, en  el Minsa  se prevé comenzar a visitar hospitales y gobernadores regionales, declarados “amigos ya de la casa.”

Como lo ha recordado el Ministro de salud, el ente regulador y promotor de la salud en todo el país es el Minsa, con un presupuesto de 9,917 millones de soles para 2018; sin embargo el Congreso de la República no da muestras de acelerar el debate al proyecto de ley que le reconozca esa jerarquía en todo el territorio nacional.

En el Perú  no ha podido derrotarse la  suplantación de personas que lo hacen  para beneficiarse  indebidamente del sistema de salud público, se registra un número considerable de  gente colada en el Seguro Integral de Salud (SIS), se entregan medicamentos a personas no afiliadas, y como si fuera poco se presta asistencia médica a personas que viven en el otro barrio, ya han fallecido. La tecnología es la ausente,  y con ella se pueden evitar muchos fraudes como los anotados. Por ejemplo, ni siquiera    la cacareada  historia clínica electrónica se sacó adelante en la administración de una Ministra aferrada a su puesto;  hasta ahora se conformaron los equipos técnicos.

Del  Seguro Social de Salud (EsSalud), ahora se afirma que está caminando a una modernización en la atención en beneficio de sus millones de asegurados. Lo cierto es que la sede de EsSalud no logra reponerse  del incendio ocurrido  hace algunos meses; los trabajadores siguen trabajando sobre los escombros. Entre tanto los asegurados siguen perdiendo tiempo, y la población en general en expectativa por las declaraciones de  Mercedes Aráoz, jefa del Gabinete Ministerial en el sentido que “ahora continuaremos con las  políticas públicas en Salud con Patricia”.

 

 

« Con Patricia García la salud pública peruana estaba montada en el Titanic. »

 


En el Perú funcionan 20,800 establecimientos de salud;  el 57.4% privados, y un 42.59% públicos. El 69.5% del total de los establecimientos de salud corresponden al primer nivel de atención (14,452 establecimientos). El Ministerio de Salud y los Gobiernos Regionales manejan 8,073 establecimientos de salud, de los cuales por ahora se repotenciarán 156 . Otra novedad en el mes que lleva el  jerarca de la salud, es la creación del Sistema Único de Información en Salud, con lo que se pretende “dejar en el pasado los tiempos de espera para lograr una atención oportuna en los hospitales”. En adelante todos los centros de salud están en la obligación de atender a  cualquier paciente independientemente que pertenezca o no a donde acude,  porque   “será el Estado quien se encargue de los trámites de compensación”.

En 2018 el Minsa se enfocará en cinco estrategias:  revalorización del recurso humano en salud;  mejoramiento de los servicios en el primer nivel de atención, la eficiencia en la distribución de los medicamentos, insumos y equipos; la mejora y mantenimiento de la infraestructura y   la lucha frontal contra la corrupción, concluyó D’Alessio.

@luforero4

 

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