El descubrimiento de un calendario astronómico, observatorio solar, o intihuatana, o reloj solar,  en el distrito de Chavín, después de más de 30 años de continuos recorridos por los restos arqueológicos de esa jurisdicción, constituye una hazaña sin precedentes en la historia de Chincha, porque este importante hecho abre la posibilidad que las culturas prístinas como la de Chincha fueron también filósofos o sacerdotes que se contactaron con el universo o espacio estelar observando los movimientos del sol y de la luna, para tener una cosmovisión del mundo, muchos años antes que los incas han estampado en Machu Picchu. Está comprobado arqueológicamente que hubo pueblos que existieron más adelantados antes de la expansión inca. Los cuzqueños no estuvieron en este valle  más allá de 70 años (Alberto Bueno Mendoza). Entonces no dejaron mucha enseñanza ni construcciones admirables, ni expectantes.

Los Chinchas iniciaron la construcción de Tambo Colorado, en el valle de Pico (Fuente: Conservador del museo de Sitio), asimismo las primeras construcciones corresponden de Chinchaycámac (La Centinela) pertenecen a los Chinchas, incluso hay pruebas de la arquitectura Nazca, adobes tipo grano de maíz, en la “huaca” El Alvarado, parte del complejo arqueológico de Chinchaycámac.

Asimismo hemos tenido conocimiento en la zona de Tayamarca, Madeán-Yauyos, que los Chinchas, Huaris, y Chancas dejaron huelas en sus yacimientos arqueológicos ubicados por esos lugares. Lo que comprueba que los Chancas estuvieron del mismo modo en Chavín, siendo los autores de la construcción de un extraordinario mirador y fundar un pequeño pueblo denominado Chancachi. De otro lado los Chancas y los Chinchas estuvieron en los valles de los ríos Lincha y Hongos, habiendo construido por esa zona varios centros arqueológicos de importancia conocido como Huanturo, Purunhuasi, y los andenes de Shihuitay, entre otros, en las alturas del distrito de Cacra, así como por las horillas del río Lincha, nos contaba un comunero de Lincha, donde los Chinchas habían sido encantados por un cerro.

Hallar el “intihuatana” en Chavín en una hazaña. Tres veces hemos estado por dicho lugar confirmando las construcciones de los Chancas y tener mayores evidencias de su ubicación por ese lugar.

Accidentalmente hallamos el observatorio solar o de mediciones astronómicas en la parte alta del mirador.

De los trabajos que venimos haciendo para conocer y tener los argumentos sólidos para sustentar que los Chancas con chinchanos y no son originarios de Choclococha como la historia indica, ya tiene conocimiento los doctores Alberto Bueno Mendoza, y Eduardo Vásquez Monge y que científicamente sustentará en un libro que los Chancas partieron de las alturas de Chincha (San Pedro de Huacarpana), llamado cerro de Auquichanca, para fundar más tarde el pueblo de Chancahuasi y después seguir al sur. Auquichanca en la actualidad pertenece a 3 provincias: Chincha, Yauyos y Castrovirreyna.

Este descubriendo de confirmarse por el arqueólogo Alberto Bueno Mendoza y reforzada por el historiador Eduardo Vásquez Monge cambiará la historia del Perú, por lo menos no hay duda, en cuanto, que los Chancas partieron de la misteriosa cumbre de Auquichanca y llegaron hasta la que hoy es la provincia de Yauyos. Habiendo ocupado extensas tierras desde Chincha hasta las alturas de Yauyos. Posteriormente habrían partido hacia Ayacucho y Apurímac, antes fundando el pueblo de Chancahuasi, que es historia conocida.     .