Fotomontaje de Antero y el director técnico de su equipo un tal Manuel Merino que juega el papel como el de la reina de Inglaterra.

	Por: Eucadio Gutiérrez Solano    Mag. Químico-farmacéutico y periodista

Ante la protesta de la ciudadanía peruana, “dolor” insoportable de los jóvenes que viene luchando por las calles del territorio peruano, contra la democracia, juró burlándose del Perú el Gabinete de Antero Flores, traicionando los sagrados intereses nacionales y abriendo su sarcófago, sin identidad, respondiendo “chi cheñó”, mientras afuera del Palacio de Gobierno gritaban no al golpe de Estado desde el congreso corrupto.

Las gigantescas banderas del Perú se paseaban por los pueblos del Perú, cantando el himno nacional, portadas por honoríficas manos de jóvenes, madres, niños y toda clase personas.

El palacio se parecía un nido de ratas, donde personajes sin sangre y conciencia besaban la cruz, refunfuñando Los Santos Evangelios, como señal de traición al pueblo, y escupitajo a los luchadores que se juegan por la moral y respeto. Se trataba de la celebración del retorno de la extrema derecha y de la corrupción.

De otro lado, quinientos años después del asesinato en masa de los nativos, producido en Cajamarca, nuevamente, con Biblia en las manos, los barbudos israelitas, entregando su alma a judas, aplaudían la macabra escena contra la democracia y el retorno de la corrupción, sin importarles que millares de manifestantes sean víctimas de gases mortales, golpes y detenciones.  No les interesó a estos llamados “profetas” que los policías disparen a diestra y siniestra gases mortales y balas. Qué bárbaro son estos creyentes de pantorrilla, hijos de taita dios Ataucusi. Debajo de la “sotana”, son los adoradores del oro y de la plata, destructor de la moral y las buenas costumbres.

A estos barbudo mal olientes, provenientes supuestamente de un sector del pueblo, no les importó votar y convivir con la peor casta, que goza y vive con la riqueza peruana, vil explotadora de los pobres. Genocidas cuellos blancos que moran con la plata mal venida. Aplaudir a los descendientes que mataron al inca, Tupac Amaru, María Parado de Bellido, y a miles y miles de héroes, que murieron por la causa del Perú, es una antinomia increíble.  

Es fiel representante de la política tradicional. Los 18 acompañantes, zorros viejos, algunos de ellos, astutos, que no tienen dignidad, ni moral, sino tienen las manos y ojos puestos en la plata.

Estos profesionales sin valores ni principios, asumen el cargo, tras un crucifijo, entregándose en cuerpo y alma, a la gente de la derecha, sin tener vergüenza y sentir lástima y dignidad por sus hermanos que tienen luchando, al extremo de ser abaleados, cual fuesen delincuentes.

Es nuestra opinión desde las provincias. Conocemos el Perú, desde mediados de la década del 60, entonces sabemos las intenciones y proyectos de la gente más corrupta que hay en el Perú. De las leyes que emitieron para beneficio de ellos. Y tantos vicios y taras que poseen la putrefacta derecha inhumana y explotadora. De modo no nos puede dar lección esta camarilla de traidores, que por amor a un sueldo traicionan al Perú.

Mientras el pueblo está luchando días tras días, estos sátrapas antiperuanos, cómodamente, realizan sus pactos, para agredir y fortalecen su fechoría, vociferando que es constitucional su fechoría, pero condenado en el mundo.

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