En OPINIÓN LIBRE |

"Periodistas" extorsionadores causantes de la desgracia de Chincha

Su presencia grupal comienza en la época de José Navarro Grau, época de la gestación de la corrupción periodística. La Plaza de Armas fue el centro de sus operaciones delincuenciales, a quienes no atendían sus chantajes.

Los pobladores ya se han dado cuenta de las “ratas” que se llaman “periodistas”, y que están tras los candidatos, no interesándoles su perfil político, sino su capacidad de regalar plata. Por eso Chincha está como está.
Los pobladores ya se han dado cuenta de las “ratas” que se llaman “periodistas”, y que están tras los candidatos, no interesándoles su perfil político, sino su capacidad de regalar plata. Por eso Chincha está como está.

 



Por: Eucadio Gutiérrez Solano  Profesor/Periodista

 

Por culpa de los periodistas del basural e intelectuales de bolsillo Chincha pasa por la peor crisis de la historia y ha tenido representantes ante el congreso y la región a personajes de toda laya; menos a un líder con formación profesional, cívica y política. 

 

Tomando las palabras del combativo periodista Juan Manuel Cañas, estos “periodistas” que, como cochinitos de la humedad, o como los insectos peloteros, fracasados en su trabajo, vieron la forma fácil de hacer plata, a base del chante, extorsión, coima y la adulación, de hicieron de periodistas, como si tratase de una organización criminal.  

 

 

 

 

Su presencia grupal comienza en la época de José Navarro Grau, época de la gestación de la corrupción periodística. La Plaza de Armas fue el centro de sus operaciones delincuenciales, donde esperaban su pago mensual y programaban despellejar a quienes no atendían sus chantajes.

 

 

 

Así, salieron como “periodistas” zapateros remendones, taxistas sin clientela, turroneros, hijos de un violador, profesores y personas ignorantes cesantes, ratero de los alimentos de un colegio, comerciante de carne de burro, chatarreros, drogadictos…en fin un grupo de analfabetos sin preparación y conocimiento periodístico. 

 

Estos emergieron -con un denominar común- para robar, chantajear, extorsionar, difamar y calumniar, y así conseguir plata sucia, siendo su primer botín los municipios provinciales, distritales, SEMAPCH e impresas corruptas, y fundamentalmente candidatos, en época electoral.

 

En tiempo de las elecciones estos chantajistas, en mancha, previo acuerdo en conjunto posados en la plaza de Armas, acordaban apoyar a un determinado candidato en función a la plata, como putas hambrientas. De ese modo quedaron en el camino los verdaderos representantes que Chincha requería como José Miguel Devéscovi, al que ellos consideraban tacaño o hueso, siendo un líder honesto y defensor de los intereses de Chincha, sobre todo de los límites. Por culpa de las miserables ratas, que se hacía llamar “periodistas”, Devéscovi no logró un escaño en el Congreso.

 

La misma suerte corrió el combativo político, luchador incansable, Mario Giorffino Coloritti, de Acción Popular, que dejó de participar por culpa de la lacra y faranduleros, que querían ser candidato populista. Estos 2 candidatos, fueron atacados miserablemente, y en tanto los personajes que abrían sus bolsillos y les daban de comer, a los cochinitos de parra, eran voceados como honestos representantes de Chincha, por quienes la población chinchana debía votar.

 

Después de las campañas electorales estos sinvergüenzas todavía tenían la concha acústica de hacer sus balances económicos.  Habían ganado un promedio de 50 mil soles por la campaña. La lid electoral dejó sendas ganancias, para después pasarse la buena viva. La mensualidad de estas pirañas, continuaba normal pues, los municipios y SEMPCH, les seguía pagando.

 

 

 

 

En tanto los periodistas honestos continuaban con pan y agua, ante la corrupción generada por lo que se habían hecho “periodistas”, y contaban con bonanza económica gracias a los alcaldes y políticos corruptos. Mediocres, pero expertos de soltar la plata.

 

 

 

Los pobladores ya se han dado cuenta de las “ratas” que se llaman “periodistas”, y que están tras los candidatos, no interesándoles su perfil político, sino su capacidad de regalar plata. Por eso Chincha está como está. Indudablemente dentro de ellos hay personas honestas, pero muy pocos.

 

De otro lado existen intelectualillos de bolsillo, que se llaman historiadores, artistas, arqueólogos, escritores, que vienen haciendo hace daño a Chinchas, siendo simples charlatanes que se asemejan a los alcohólicos de las cámaras de gas o de muerte lenta.

 

En tanto, los pirañitas que se auto titulados como periodistas y los intelectualillo de bolsillo como el indio Tasayacu, que salió a atacarnos, defendiendo la corrupción, son los causantes del atraso de Chincha. Hay que poner fin a esta lacra que vienen aumentando de generación en generación y son venenos para la colectividad.  

 

El pueblo tiene la palabra.

 

NB: Los artículos publicados en la Sección Opinión Libre son de entera responsabilidad de sus autores. El contenido no refleja necesariamente la opinión de Huachos.com

RELACIONADAS

SUSCRÍBASE AL BOLETÍN DE HUACHOS.COM

Recibe las últimas noticias del día

Su Nombre Completo
Correo Electrónico


TE PUEDE INTERESAR
Escribe tu comentario