CENTRO LIBER | El octubre de 2021, el expresidente Pedro Castillo dispuso de un helicóptero del Ejército para un viaje recreacional de sus hijos Arnold y Alondra Castillo Paredes con destino Lima - Playa Paraíso (Huacho) - Lima. Los menores viajaron en compañía de Graciela Palomino Gómez, esposa del entonces secretario general Bruno Pacheco, y de sus hijas Yasmin, Brunella y Vania Pacheco Palomino.

El equipo de Centro Liber accedió a documentos oficiales en los que consta la preparación y puesta en marcha de este irregular vuelo familiar y recreacional que intentó camuflarse como un viaje oficial como parte de las actividades presidenciales.

Mediante el oficio 354 - 2021 - DP / CMED, de fecha 28 de septiembre de 2021, el entonces jefe de la Casa Militar del Presidente de la República, Miguel Alberto Herrera Cespedes, envió una solicitud de aeronave al Ejército. El documento fue dirigido al General de Brigada, Ángel Pajuelo Jibaja, Secretario de la Comandancia General del Ejército. Según  se lee en el documento, “por especial encargo del Despacho Presidencial agradeceré disponer las acciones necesarias que permitan el apoyo a las actividades del señor Presidente”.

Para lo cual, se solicitó un helicóptero MI 171 Sh-P para el itinerario ida y vuelta Lima - Playa Paraíso, en el distrito de Huacho. El transporte aéreo debía encontrarse listo para iniciar operación a partir de las 08:00 horas del día sábado 02  de octubre del 2021. Las coordinaciones estuvieron a cargo del Teniente Coronel Luis Honores Aguilar.

Informe contraloria vuelos presidenciales.

El 2 de octubre, el helicóptero EP partió desde el Fuerte Rafael Hoyos Rubio en el distrito del Rímac, en Lima, hacia la Playa Paraíso en Huacho. Entre sus pasajeros estaban Arnold y Alondra Castillo Paredes, hijos del expresidente, Graciela Palomino Gómez, esposa de Bruno Pacheco, y sus hijas Yasmin, Brunella y Vania Pacheco Palomino. Asimismo, abordó la aeronave Jherel Yasmin Arizola Castillo, sobrina del exmandatario. Se trató de un vuelo a todas luces familiar y de recreación al que, dicho sea de paso, no asistió Pedro Castillo, pese a que el documento de solicitud precisa “apoyo a las actividades del señor Presidente”.

Como parte de la tripulación, además, estuvieron dos secretarios de prensaFranco Playa Neyra y José Luis Cristobal Quispe; el entonces edecán  Roberto Quesada; y Emiraldo Almerco, como parte de la oficina de protocolo. Abordaron también el Coronel Marco Marín Saldaña y dos miembros del equipo de seguridad, Eric Huaymana y Liz Izarra y el Teniente Coronel Enrique Tamariz Luna y el suboficial John Vega Benitez. Estos dos últimos armamentistas.

Este vuelo confirma la teoría del uso indebido de las aeronaves del Estado por parte del expresidente. La Comisión investigadora del Congreso encargada de darle seguimiento a este asunto consideró que se trata de hechos y conductas que constituyen presuntos ilícitos penales. A Pedro Castillo se le sumaría una investigación fiscal adicional por el delito de peculado de uso.