Sitio donde estan ubicados los petroglifos, las maquinarias pesadas de ALVAC voltearon la piedras.
 

 

La atrocidad y salvajismo perpetrado contra los petroglifos de Marcas II, “perteneciente” al distrito de Huachos,  es increíble. Lo insólito es que los petroglifos de Marcas II, que tenía una prueba irrefutable de la arqueología peruana y mundial en donde se enonctraba el icono del misterioso hombre-jaguar, ha desaparecido por manos, criminales y atroces de los irresponsables del asfaltado de la carretera Chincha-Villa de Arma, primera etapa, carretera que es un “engaña muchachos”, porque su duración no pasaría de 5 años.

 

El hecho de atentar y destruir un patrimonio arqueológico de la Nación como son los petroglifos de Marcas II se ha cometido un delito contra la cultura arqueológica del distrito de Huachos. Las imágenes hablan de por así, de la gravedad del daño causado a los petroglifos, reliquia única pétrea mundial,  que había  en esa zonas.

Pareciera que a las autoridades de Huachos no les ha interesado en absoluto el desarrollo del anexo de Marcas, por su estado de abandono, a pesar de estar de estar en el centro de la carretera que pasa hacia los demás distritos de la zona norte de Castrovirreyna. Su alcalde y regidores paren ser unos perfectos ignorantes en materia de la cultura y arqueología. En la jurisdicción de Huachos, registrados en muchos libros de arqueología están los petroglifos de Marcas I, pampa de las Petacas, y el recientemente descubierto Marcas II, se sabe que hay más que no se conocen.

 

Tal vez el abandono y el olvido sea porque el territorio de Marcas se encuentra en pugna con el distrito de Capillas, incluso hay una muerte de un campesino. No sabemos si hasta la fecha el proceso judicial está oleada y sacramentada, en todo caso los litigios continúan, hasta que la denuncia quede archivada.

El hecho es que se ha destruido los petroglifos de Marcas II por la empresa que está llevando a efecto la construcción del asfaltado de la carretera Chincha-Arma, primera etapa de la carretera Chincha-Huancavelica. La destrucción cometida es la peor desgracia hecha contra la arqueología peruana, si se trata de Huachos, o es de Capillas; pues el Ministerio de Cultura, filial Huancavelica, el que tiene que intervenir de inmediato.