En CHAQRA RUNA |

Análisis de suelos, una práctica indispensable y olvidada en la agricultura peruana | VIDEO

“En el Perú, solo el 2% de los agricultores han realizado estudio de suelos (44.000 productores), según la última Encuesta Nacional Agropecuaria (ENA: 2019)” afirma el especialista Miguel Picado.

El suelo es “fértil” cuando proporciona nutrientes esenciales a las plantas y cuenta con condiciones químicas, físicas y biológicas favorables para su crecimiento..
El suelo es “fértil” cuando proporciona nutrientes esenciales a las plantas y cuenta con condiciones químicas, físicas y biológicas favorables para su crecimiento..

 

El análisis de suelos es una práctica fundamental para la toma de decisiones en la agricultura, pues nos brinda información clave sobre la disponibilidad de nutrientes y el nivel de fertilidad de los suelos, elementos que son fundamentales para una adecuada elección de los cultivos a sembrar, de los insumos a incluir y de los recursos a invertir.

 

En el Perú, sin embargo, solo el 2% de los agricultores han realizado análisis de suelos (44.000 productores), según la última Encuesta Nacional Agropecuaria (ENA: 2019).

 

Lea también:

 

 

El uso más difundido de esta práctica es con fines de fertilización, pues permite determinar los requerimientos óptimos de nutrientes para aplicarlos luego de manera controlada. De no realizarse este análisis, la probabilidad de fallar en las cantidades y tipos de nutrientes que necesita la tierra es muy alta. Esta situación ocurre precisamente con la urea, el nitrato de amonio y otros fertilizantes químicos de uso extensivo en el país (cerca de la mitad de los productores en el país usan fertilizantes químicos según el censo). Al no realizarse análisis de suelos en la mayoría de los casos, se suelen aplicar cantidades mayores de las que se necesitan fomentando una carga adicional de nutrientes que luego no son aprovechados o absorbidos por la planta, pero sí por el ambiente (contaminación por exceso de nitrógeno o similares).

 

Además de la contaminación ambiental por el exceso de estos fertilizantes, se termina acelerando también el proceso de deterioro de los mismos suelos reduciendo su potencial de producción y rendimientos futuros. Hay, en efecto, un costo ambiental y físico muy alto de la poca difusión de esta práctica. Por tanto, hacer del análisis de suelos una práctica común en la agricultura no solo representaría beneficios para el productor mediante un mejor uso de sus insumos químicos, sino también beneficios más allá del productor (externalidades ambientales y físicas).

 

 

Lamentablemente, esta práctica agrícola tan importante y necesaria no ha sido muy difundida, salvo en la agricultura más moderna y con enfoque empresarial. Es difícil rastrear la evolución de la práctica del análisis de suelos en el país, pues no hay fuentes de información estadística que la respalden. La única es la proveniente de la ENA, la cual advierte que la práctica del análisis de suelos se ha mantenido muy limitada en el país y a lo largo de las tres regiones naturales. Hay, por tanto, una necesidad urgente de difusión de esta práctica agrícola a nivel nacional. Más allá de las razones particulares a cada productor (sobrecostos, pérdida de tiempo, desconocimiento, etc.), hay una necesidad de la presencia urgente del Estado por su compromiso no solo con el desarrollo agrícola del país, sino también con su sostenibilidad.

RELACIONADAS

SUSCRÍBASE AL BOLETÍN DE HUACHOS.COM

Recibe las últimas noticias del día

Su Nombre Completo
Correo Electrónico


TE PUEDE INTERESAR
Escribe tu comentario
Multimedia
HUANCAVELICA
ica
Entretenimiento
Rome Reports
Pandemia